Tipos de montacargas, clasificación y sus aplicaciones.

Tipos de montacargas, clasificación y sus aplicaciones.

Los equipos para el movimiento de cargas cuentan con múltiples diseños que los hacen ideales para desempeñar determinado tipo de tareas, a continuación se describen los más convencionales y se ofrece una clasificación de los mismos propuesta por la OSHA. 

Montacargas de almacén: Denominada como carretilla elevadora contrapesada cuenta con un espacio para el conductor desde una cabina protectora, puede encontrarse en modalidades de 4 y 3 ruedas para realizar giros bruscos en zonas estrechas y giros circulares respectivamente. Además está equipada con dos horquillas desplazables hacía adelante y atrás para brindar estabilidad de la carga aunado a un mástil extensible para subir y bajar. Su tamaño medio es el de un carrito de golf y pueden diferenciarse popularmente por su fuente de energía en eléctrica, gas o propano. 

Montacargas lateral: De diseño similar a un montacargas convencional de almacén con la gran diferencia que las horquillas han sido posicionadas en la parte lateral de la máquina en comparación con el posicionamiento en la parte delantera de un montacargas común de almacén. Este diseño permite al operador un desplazamiento lateral entre pasillos y por lo tanto un acceso a inventarios más largos. Además algunas versiones están equipadas con ruedas multi dirección que permiten giros de 90 grados lo que se traduce en seguir la dirección de la carga sin tener que girar.  

Montacargas recogepedidos: Son máquinas de pie compactas en el que el operador se posiciona en una plataforma operativa que permite desplazamientos arriba y abajo sobre el mástil, así como movimientos direccionales para posicionar el vehículo según se requiera. Son ideales para la recolección de artículos no pesados de un estante como lo son cajas, herramientas u otros objetos. Permiten realizar maniobras en espacios pequeños y su desventaja principal radica en que no son recomendados para terrenos irregulares o pendientes. 

Carretillas elevadoras telescópicas: Son máquinas de alcance variable montadas comúnmente sobre un equipo de servicio pesado. Su brazo telescópico extensible permite llegar a cargas dónde una carretilla elevadora convencional de tipo mástil no podría. 

Carretillas todo terreno: Diseñadas para el trabajo al aire libre como lo son sitios de construcción con superficies irregulares en las que un montacargas convencional no podría operar con seguridad debido a la inestabilidad del vehículo. Su diseño es similar a un tractor con horquillas y cuentan con piezas para mejorar la estabilidad operativa como lo son neumáticos de gran tamaño y cuyas bandas de rodadura de alto grosor brindan mejor tracción, sus capacidades oscilan entre las 5000 a 8000 libras comúnmente. 

Montacargas de alcance: Equipados con un mástil extensible y en algunos diseños permite el desplazamiento de las horquillas hacia afuera para alcanzar pallets. Múltiples fabricantes posicionan la estación de operador para controlarse de pie o sentado con los controles de operación invertidos en comparación a un montacargas convencional por lo cual será necesaria experiencia para acostumbrarse a estos mandos.

Montacargas industriales de alta capacidad: Conocidos como carretillas elevadoras industriales su diseño permite una capacidad de carga por encima de los montacargas convencionales y otros equipos. Los valores oscilan entre las 19000 y 36000 libras que es el principal rasgo distintivo de esta clase de máquinas.

Transpalé: Máquina de mano de dimensiones reducidas equipada con horquillas dobles  deslizables y en algunos diseños cuenta con un sistema de elevación hidráulico para la elevación de la carga. Ideal para pequeños almacenes que requieren mover cargas reducidas. 

Clasificación de montacargas

La OSHA (Administración de Seguridad y Salud Ocupacional) distingue 7 clases de máquinas montacargas: 

Clase 1: Vehículos para un sólo pasajero equipados con un motor eléctrico, sus llantas pueden ser sólidas o neumáticas y cuentan con contrapeso para la estabilización de la carga.

Usos: Recomendado para interiores en los que es necesario controlar las emisiones convencionales provocadas por un vehículo con motor de combustión.  

Clase 2: Vehículos diseñados para pasillo estrecho, equipados con motor eléctrico. Suelen contar con llantas sólidas.

Usos: Recomendados para el movimiento de cargas en espacios estrechos o limitados. Algunos ejemplos serán los montacargas bilaterales y trilaterales. 

Clase 3: Vehículos de mano equipados con motor eléctrico con o sin espacio para pasajeros. Suelen emplear llantas sólidas. 

Usos: Ideales para realizar la carga rápida a distancias cortas de unidades de reparto como camiones u otros vehículos.

Clase 4: Vehículos de combustión interna basados en diésel o gas generalmente equipados con llantas sólidas y de horquillas contrapesadas. 

Usos: En áreas de trabajo con baja altura y poco espacio. 

Clase 5: Vehículos de combustión interna basados en gas o diésel que emplean generalmente neumáticos en las llantas. 

Usos: 

Clase 6: Tractores de combustión interna  o eléctricos con llantas sólidas o de neumáticos.

Usos: Acarreo de material o remolque de cargas superiores a los 453 kg o 999 lbs. 

Clase 7: Vehículos todo terreno dentro de los cuales se pueden encontrar máquinas de construcción robusta con mástiles de tipo vertical, máquinas de alcance variable equipadas con aditamentos como plumas telescópicas y equipos montados sobre camiones/remolques.

Usos:  Ideales para sitios de construcción con superficies irregulares, terrenos naturales no mejorados, etc.